sábado, 13 de febrero de 2010

Tacones

De catálogo, de diseñador, de segunda mano o vintage; de centro comercial, los del centrito y los del mercadito. Piratas, de fayuca, de concepto y de diseño. Tacones hay para aventar arriba.
Hacen que las piernas se vean mas largas y bonitas. Ni que hablar de los centímetros extra que añaden a nuestra estatura. Son un símbolo de feminidad, sexualidad, y elegancia. Todo un fetiche.

Todos sabemos que los tacones pueden ser una tortura, sino, cheque los Prada de un par de temporadas atrás, estaban geniales y lindísimos, con toda esa piel de serpiente, pero imposibles de caminar, ellos fueron la razón de las caídas de las modelos en su propia pasarela.


(Fabulosos pero altamente inestables, los zapatos de Prada primavera verano 2009)


Los tacones muy empinados, si se usan por largo tiempo producen tendinitis en el metatarso, ya que se carga 75% de tu peso y el de tu “parafernalia” sólo en esa zona.


(Inclinación del pie sobre el tacón de 6pulgadas. Ilustración de John Willie, famoso por sus temas de sadomasoquismo y bondage)



Y es que esta masacre comienza con la pasarela, la campaña de publicidad y los editoriales de moda en las revistas IT, entonces, tacones que son únicamente de pasarela, resultan llevables por algunas atrevidas “ataviadas de fama”, y se vuelven tendencias que todas las chicas quieren, pero son “mortales”, altamente deformantes y en algunos casos ridículos. Como los Nina Ricci, son horribles e incómodos, pero monamente diseñados, sinceramente nada por que morir.

(La excéntrica socialité Daphne Guineness en un look Off The Runway de Alexander McQueen)


(De la última colección del diseñador sueco Oliver Theskyens para Ninna Ricci)


Por otro lado están los Lobster shoes y los tacones alienados, ambos de Alexander Mc Queen, que, aunque son inmensos y los primeros parecen patas de cangrejo-alien y los segundos mutaciones de Alien, son súper bonitos y producen deseo, pero mas importante, no tiró a ni una modelo durante la pasarela, eso quiere decir que “están bien diseñados”. A la vez hace pensar a los estilistas como usarlos para que se vean cotidianos o asequibles, valores que naturalmente no poseen.


(De la más reciente colección de Alexander McQueen, todo un suceso)


Ultimadamente, en México no hay dinero para pagar esos zapatitos y lo que buena mente nos llega son monisimos pero incomodisimos, porqué, aunque se compra cierta estética, no se compra tecnología. Entonces, los zapatos tacón de clavo, se convierten en “clavo en el tacón”. El diseño y la tecnología a favor de de la moda y de nosotros mismos nos ayudarían a crear mejores cosas, no solo tacones.


(Edición limitada de Roger Vivier de satín con aplicación de rosa y un detalle encantador de espina en el tacón)

Por que no podemos dejar pasar las tendencias, obtendremos esos estiletos con formas de rosa, aunque sea en su versión “Delmon Delmer”, (del montón del mercadito), en lugar de los “Roger Vivier” originales, importandonos poco la calidad, la forma y tecnología, “” total, con que den el gataso es mas que suficiente.

¿No sería más onda impulsar la industria zapatera del país y a los diseñadores e ingenieros zapateros, para desarrollar zapatitos a la ultima, pero que no te muelan la columna através de los pies?.

2 comentarios:

Adrian dijo...

Que horror, nunca me han gustado los tacones. Hacen que las mujeres se vean como extraterrestres

Adrian dijo...

Y mi comentario es en general, desde como caminan las mujeres con tacon hasta como se ve el despegue del suelo no importa la forma del tacon. Son zancos chiquitos, y si no hacen a los payasos mas humanos, tampoco a las mujeres